lunes, 29 de diciembre de 2008


Qué vaivén, qué ajetreo, qué mareo, qué ruina ¿y por culpa de quién? ¡Del amor de una mina! ¿y total para qué? Si, al final, se rajó con un pibe que le prohibe a mi ex ir a verme al Gran Rex (cuando estoy de visita). No sea que Paulita se ponga a llorar al oír su milonga; no sea que a Paulita se le dé por bailar al compás de la conga y vuelva enfermita a González Catán y no se reponga .. y se ponga más loca de lo habitual.

No hay comentarios: